La coalición opositora y la coalición de exrectores de la Universidad Veracruzana.

Elías González

Columna | Xalapa, Ver., 18 de octubre 2022.- Más allá de las legítimas causas de los estudiantes e ímpetus adolescentes por la justicia de género expresados en el mes de octubre, lo cierto es que, en su primer cuarto de siglo, la autonomía de la Universidad Veracruzana está siendo objeto de un asedio de los partidos políticos a través de los grupos de interés internos que se formaron en administraciones pasadas con los exgobernadores Dante Delgado, Fidel Herrera, Javier Duarte, Miguel Ángel Yunes y hasta Cuitláhuac García.

Al igual que en las elecciones para presidente y gobernador, los interesados en lograr posiciones, manejar el presupuesto y los recursos de la universidad afines a los exrectores Rafael Hernández Villalpando (expresidente municipal y actual diputado por Morena), Víctor Arredondo (que con sus empresas siguió llenándose los bolsillos durante el periodo de Sara), Raúl Arias Lovillo (excandidato de Movimiento Ciudadano a la presidencia de Xalapa, ambos con filias al exgobernador priista Fidel Herrera y Dante Delgado), Sara Ladrón de Guevara (quien supo ceder espacios clave a Javier Duarte, Miguel Ángel Yunes y Cuitláhuac García, para mantenerse por ocho años en la cima de las Lomas del Estadio) impulsan a sus grupos internos en aras de entregar los espacios universitarios a sus partidos políticos, traicionando la autonomía a la que se debían sus gestiones.

Una muestra de ello, es lo ocurrido en la Facultad de Psicología, que a través una alumna de la comunidad LGBTIQ+ que formaba parte de “Las medusas”, se infiltró una asociación de mujeres de la coalición opositora llamadas “Red Nacional de Mujeres Defensoras de la Paridad en Todo”, la asociación apadrinada por el diputado Juan Javier Gómez Cazarín, ajenas a la actividad académica, divulgación del saber y de investigación universitaria.

Esta organización está financiada desde el Congreso de Veracruz por la diputada priista local Anilú Ingram Vallines y la federal Lorena Piñón Rivera, quienes desde la facultad de Derecho y de Enfermería, son apoyadas por el exconsejero del desaparecido IEV, Jacobo Domínguez Gudini, que además tienen lazos cercanos con el rector de la Universidad de Xalapa, Carlos García Méndez, Secretario de Desarrollo Económico y Portuario del de Nopaltepec.

También, dentro de la modernidad neopriista, están la exdiputada local y expresidenta municipal de Xalapa, Elizabeth Morales, quien es presidenta de la “Red Nacional de Mujeres Defensoras de la Paridad en Todo” quien promueve la precandidatura de Beatriz Paredes Rangel como cuota de género para la coalición opositora, junto con la extitular del IVEC y directora de la Fundación Colosio en Veracruz, Leticia Perlasca y con la primera directora del Instituto Veracruzano de la Mujer Martha Mendoza Parisi, cuyo feminismo conservador lo han radicalizado con el grupo de “las Medusas”, al asociarse con las encargadas del programa de género del PRD Miriam Lagunes Marín, buscando votos en la inocencia de los universitarios.

De igual modo, apoyan este movimiento que en la pasada campaña por la designación rectoral 2021, apoyaron a las dos mujeres, la economista Ana Beatriz Lira Roca, la comunicadora Rocío Ojeda Callado y la doctora Yolanda Méndez Grajales. En tanto que otros grupos del PRI en la UV como Rafael Arias Hercández apoyaron a sus camaradas de partido Héctor Francisco Coronel Brizio, Jorge Manzo Denes y José Luis Cuevas Gayosso.

Por su parte, los neopanistas, esto es por el ala de los Yunes, hicieron diputada local a Verónica Pulido Herrera, quien es profesora de tiempo completo en la Facultad de Nutrición, gracias a la comisión que le otorgó la exrectora Sara Ladrón de Guevara, y el caso de quien fuera su secretaria de Administración y Finanzas, Clementina Guerrero que pasó a la SEFIPLAN en el bienio de Yunes Linares, con quienes operan en el área de ciencias de salud, apoyando las candidaturas de la pasada designación rectoral a Jorge Manzo Denes (quien también anda ahora buscando que Morena lo apoye) y Héctor Brizio Coronel.

Estos grupos que le apuestan ilegalmente a debilitar la autonomía de la Universidad Veracruzana, no son tan congruentes en defender la autonomía del Instituto Nacional Electoral, sino más bien buscan seguir infiltrando a la máxima Casa de Estudios para seguir desviando recursos y favorecer a sus correligionarios que aspiran cargos de elección popular, porque también se ha metido para dibujar una crisis el secretario de gobierno, Eric Patrocinio Cisneros -quien controla al grupo de anarquistas o bloque negro, quienes también estuvieron presentes en la pasada marcha estudiantil, por ello, los estudiantes no deben permitir ser manipulados. Atentos jóvenes, no se corrompan, no corrompan sus ideales.