Poder Judicial, a unos pasos de recuperar el orden.
Contrapunto
Miguel Ángel Gómez Ruiz
Xalapa, Ver., 05 de noviembre 2021.- Este viernes inició actividades la sexagésima sexta legislatura del estado. Arranca en medio de contradicciones y con una elevada carga de trabajo, entre ellas, la de atender las determinaciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) con relación a la restitución de sus cargos como magistrados a Roberto Dorantes Romero y Marco Antonio Lezama Moo.
Los diputados que formaron parte de la anterior legislatura, a sabiendas que se equivocaron hace tiempo al elevar como magistrados a varios elementos sin carrera judicial y sin que les correspondiera, cayeron en desacato y estuvieron a punto de ser destituidos, multados e inhabilitados por no restituir a los experimentados juristas.
Ahora, los que entran, deberán trabajar de prisa, conformando las comisiones para que se estudien los casos de los magistrados destituidos indebidamente y deberán tomarles protesta.
De hacerlo, se recuperará un poco de orden y ojalá que también se aplique la ley de manera correcta. Que aprendan a leer y comprender la Constitución Política de Veracruz y sobre todo, que aprendan el reglamento de la legislatura.
Todo indica que el presidente de la Junta de Coordinación Política será Juan Javier Gómez Cazarín. No falta quien lo responsabilice que se equivocó o bien, que confió en personas que al final, no le ayudaron en lo que se requería.
Ahora, tiene la gran oportunidad de hacer las cosas bien. Si se rodea de personas que conozcan la ley no hay duda de que las cosas se harán bien. Del mismo modo, deberá abrir espacio al diálogo con todas las fuerzas políticas. Encabezar la legislatura estatal no significa que se debe acaparar a la mayoría de diputados para ganar por ganar, sino que se trata que se legisle bien, a fin de no afectar a los veracruzanos.
En cuanto al poder judicial, pese a los pronósticos de que la situación se haría insostenible –así parecía-, todo se ha mantenido en orden. Es cierto, los pronósticos eran fatalistas, sobre todo porque se anunció hace unos meses que se requerían, por lo menos, 500 millones de pesos para cubrir las necesidades de fin de año y algunos adeudos debido a la construcción de algunas ciudades judiciales.
Es cierto, falta resolver el tema de los magistrados que deben ser repuestos en sus cargos, no sólo por determinación de la Suprema Corte de Justicia, sino porque se requiere experiencia y ellos la brindan.
También, es importante que se resuelva la situación de la magistrada Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros, una mujer con un trabajo brillante durante 49 años, 27 de ellos como magistrada y que debió continuar debido a que su nombramiento y cargos son inamovibles. Es tiempo para que se le pague su retiro y también se le permita tramitar su jubilación. Antes de eso hay que esperar una resolución de la SCJN.
Del mismo modo, resolver el tema de las ciudades judiciales y solicitar un presupuesto adecuado, para no vivir las mismas preocupaciones que este año.
Pese a una fuerte oposición y críticas en medios, todo indica que los ahorros en sueldo y gastos, la no contratación de nuevo personal y otras acciones, sí sirvieron para que se estabilizara la situación financiera en el Poder judicial.
Digna de destacar la buena actuación de la directora de administración del Consejo de la Judicatura, Joana Marlén Bautista, que ya había dado buenos resultados en la Secretaría de Finanzas y Planeación y que ahora, ha puesto orden en el gasto del Poder Judicial.
Toca turno a la presidente del Poder Judicial, Isabel Inés Romero Cruz resolver los pendientes antes mencionados. Si gusta de la justicia, deberá obedecer lo dictaminado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación y recibir a los magistrados Roberto Dorantes Romero y Marco Antonio Lezama Moo y ¿Por qué no? Olvidar rencillas pasadas y darle su lugar a Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros, sobre todo respetado una trayectoria intachable y que, además, ha sido la única magistrada que recibió el Premio Nacional al Mérito Judicial.
Ojalá que todo se vuelva una grata realidad y que se trabaje al cien por ciento en el Poder Judicial de Veracruz.