Delicada situación de Isabel Inés Romero Cruz
Miguel Ángel Gómez Ruiz
Xalapa, Ver., La extraña llegada de Isabel Inés Romero Cruz a la presidencia del Poder Judicial causó graves problemas de los que ahora no pueden salir allí.Ya se ha dicho en varias ocasiones, primero 13 magistrados, luego seis más en 2020 y ahora hace apenas unos días se nombró a otras tres personas.
En el caso de Isabel Inés Romero Cruz, quien ya había sido jubilada al cumplir 65 años y que fue reactivada por así convenir a los intereses de Morena, haciéndola magistrada sin tener capacidad para ello.
Aunque, de acuerdo a denuncias y sobre el tramo que recorrió en el Poder Judicial, sí estuvo a punto de ser encarcelada por violar la Ley de Amparo, pues ocultó un amparo que obtuvo un preso y que provocaría que obtuviera su libertad.
Cuando fue descubierta, fue despedida por la magistrada Teresita Álvarez de Santés. Isabel Inés corrió al despacho de Julio Patiño y éste, por lástima, la envió a un juzgado lejano para que el asunto se olvidara.Enferma y solaLa vida dentro del Poder Judicial no ha sido la mejor para Isabel Inés Romero Cruz.
No tiene especialidad y carece de conocimientos. Ha sido rebasada por sus propios colaboradores y por ello permanece encerrada en su despacho. De hecho, acude a algún evento si se realiza allí en el edificio que la alberga, pero no sale a otros lados, no le gusta exponerse y menos ante la grave situación que vive el Poder Judicial por la pandemia y las carencias en que se encuentran el personal y los justiciables.
A alguien se le ocurrió recomendarle a Isabel Inés Romero que para mantenerse sana, despierta y a medio pie, tomara una bebida aguardentosa con crucetillo, una planta que muchas personas en las zonas serranas utilizan para combatir enfermedades pulmonares y hasta el Covid-19.Quienes están cerca de Isabel Inés desde antes que se sacara la lotería y la nombraran magistrada aseguran que ya le gustaba de cuando en cuando echarse una copita en su despacho.
Inclusive, una columnista de Xalapa, reveló que hace unos días, Isabel Inés Romero Cruz cumplió años y en horario laboral, le realizaron un convivio en su oficina. No se reparó en gastos, hubo todo tipo de licor y las mejores botanas. No hubo sana distancia y le celebraron que cumplió 69 años.