La súper policía de Cuitláhuac.
Contrapunto
Miguel Ángel Gómez Ruiz
Xalapa, Ver., 18 de octubre 2022.- No ha hecho falta desnudar las deficiencias de la corporación que forma parte de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Veracruz. Sus mismos elementos se han encargado de ello.
Lo mismo se introducen a las casas a tratar de detener a personas (sin órdenes judiciales), golpean a detenidos en los separos y hasta son sorprendidos robando tráilers y al final, les dan su regañada y los declaran listos para que salgan a proteger a la población.
Así de simple, en lugar de despedir a los malos elementos, nomás los reciclan y éstos vuelven a las calles a continuar haciendo de las suyas.
Ya de por sí es bastante que el jefe de la corporación, Hugo Gutiérrez Maldonado, haya sido despedido en la administración de Jaime Rodríguez “El Bronco”, el entonces gobernador de Nuevo León, por algunos pecadillos cometidos que calaron hondo en el mandatario.
No olvidemos que la policía estatal siempre ha liderado la lista de demandas e inconformidades en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), por las malas prácticas de sus poco capacitados elementos.
El detalle es que se presume que cada vez son más los policías que se capacitan en la Academia de El Lencero y pareciera que salen peor, pues seguramente muchos creen que ser policía es el gran negocio de la vida, no por los salarios, sino porque tienen campo abierto para hacer de las suyas.
Es decir, en lugar de combatir a los criminales, algunos de sus elementos se dedican a realizar sus recorridos, tomarse fotografías y a detener a incautos para simular que cumplen con sus tareas. Al final, tras llevarlos a los separos, las investigaciones continúan y los jueces liberan a los detenidos, mayormente porque no tenían nada qué ver en los delitos con los que pretendían encarcelarlos.
Lo de los sujetos detenidos en Puebla –ordeñando un tráiler- fue increíble. Fueron acusados por el gobierno de Puebla, intervino la Fiscalía General de la República (FGR) y a pesar que había suficientes elementos para darles de baja y remitirlos a prisión, únicamente se les dio un regaño, pues no siguieron los protocolos, según lo comentó el gobernador Cuitláhuac García.
Y lo que es peor, los regresan a Veracruz, les amonestan y ya están listos para salir a las calles para que sigan en sus actividades. De no creerse, en verdad.
Hace apenas unos días, tras la muerte de una profesora fuera de una escuela en la colonia Aguacatal, los elementos de Gutiérrez Maldonado pretendieron detener a un joven dentro de su casa. Sin orden de aprehensión y sin que les correspondiera hacerlo –eso únicamente pueden hacerlo policías ministeriales con la orden de un juez- violentaron ese hogar y querían llevarse al joven. Lo golpearon y humillaron y al final, tuvieron que retirarse.
Lo mismo ocurrió cuando persiguieron a elementos ministeriales tras una acción que culminó en Coapexpan. Pero los vecinos que presenciaron todo aseguran que los policías sí dispararon a los ministeriales. Al final, no hubo heridos y se reconoció que fue una confusión.
Y encima, las golpizas a detenidos que, en algunas ocasiones, no resultan ser los que eran buscados. Hoy día, la imagen del policía veracruzano es la de un troglodita armado, peinado con gel de 10 pesos, uniforme ajustado debido al sobrepeso y con un actuar digno de una película de caníbales. Lamentablemente así es.
Coatepec
En Coatepec, el alcalde del lugar, Raymundo Andrade sigue con la brújula perdida. Casi no hay obras y las únicas que hay son unas calles que debían ser reparadas a la brevedad y hoy día, el retraso es brutal.
Tan solo la calle de Melchor Ocampo, entre Santos Degollado y Miguel Lerdo, lleva más de dos meses de iniciada y se supone que debía ser entregada al iniciar noviembre. Cierto, las lluvias contribuyeron a que hubiera retrasos, sin embargo, si el alcalde hubiera aplicado un buen criterio, lo mejor hubiera sido programarla un poco antes o bien, para inicios de 2023.
No, no es una obra electorera, pues en el caso de esta calle, Raymundo Andrade tuvo que ceder no sólo a las presiones de empresarios, sino también porque Coatepec es pueblo mágico y resultaba imposible creer que esa calle, a unos metros de palacio municipal, no hubiese recibido atención en tantos años. Y lo mismo ocurre en la calle Miguel Rebolledo. Todo va mal, sin duda.
Por otro lado, la ciudad luce sucia, muy sucia.
Además, pese a que aseguran que el alcalde es comerciante, tampoco ha aplicado la ley para resolver los problemas generados por los comerciantes ambulantes. Hace apenas unas semanas se generó un problema con Antorcha Campesina porque quitaron a varios vendedores del parque que fue inaugurado el año pasado. También los de esta organización hacen de las suyas afuera del mercado Rebolledo. Sólo se trata de aplicar la ley, pero el alcalde, al parecer, ni la conoce.
PD Gracias a su buen criterio y su apertura al diálogo, para el dirigente del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento de Xalapa, Rolando Ortega Salazar, las negociaciones para aumento salarial y revisión del contrato colectivo de trabajo este año fueron un éxito. Él cuenta con la amistad del alcalde Ricardo Ahued Bardahuil y eso generó buenos resultados. Aumento salarial, disposición de recursos para trabajadores vulnerables y una despensa mensual con valor de 2 mil pesos son el resultado de una buena negociación. Felicidades.