19 octubre, 2024

La línea delgada entre mi opinión y la tuya.

Por. Julio Vallejo

Mientras robas: se le va la vida.

¿Qué pasaría?; si el comportamiento colectivo fuera diferente y lo ocupáramos en momentos claves.

Las diez con cuarenta minutos, dentro de un tracto camión se escuchaba una canción de Roberto Carlos.

“Cada día por la carretera, noches madrugada entera y mi amor aumenta más. Yo seee yeii yeii siempre en esa carretera al volante en ella pienso, ya pinté en el parachoques un corazón y en nombre de ella”.

Once horas con diez minutos, marcaban a la cruz roja para avisar de un accidente de un tráiler en la autopista Perote a Xalapa.

Mientras esto sucedía en el lugar del accidente ya se encontraban una docena de personas quitando y escombrando los abarrotes que transportaba el tracto camión, ¡no precisamente de buenos samaritanos!

Después de un tiempo transcurrido, se escuchaba a lo lejos un maullido de un gato que salía de la sirena de una ambulancia y a la par la de una patrulla de la guardia nacional.

A pesar de la advertencia del acercamiento de las autoridades, las ratas estaban rodeando y saqueando el tráiler, ¿de dónde sale tanta gente para llevarse toda esa mercancía que quedó decorando la carpeta asfáltica?, ¿quién sabe?

Lo que sí es una afirmación, es que aquí y en cualquier lado esto se le llama “robo e impunidad, hasta valemadrismo”.

Muchas personas piensan que este cargamento está asegurado, cosa que no es así, los dueños de esa mercancía proponen a las autoridades que este tipo de acciones se declare como un delito grave ya que las pérdidas son millonarias.

Desde hace muchos años este tipo de prácticas pareciera que dejo de insensibilizar al ser humano, ya que cada vez que pasa este tipo de acontecimientos las personas que llegan al lugar prefieren robarse la mercancía que ayudar al chofer, muestra de ello fue en este accidente.

Una persona mientras grababa en el lugar, exclamaba: “muriendo el chofer ahí y la gente chingándose las cosas”. En ese video se aprecia los últimos momentos de vida del conductor, para eso ya tenía rato el accidente, casi el mismo tiempo que los lugareños llevaban sacando las cajas del tráiler y guardándolas dentro del monte.

Es muy lamentable ver como somos realmente los mexicanos cuando una conducta individual nos ayuda, pero en algunos casos la conducta colectiva nos perjudica, muestra de ello es este tema, donde ni uno solo hizo desde el inicio por acudir al auxilio del chofer, todos se fueron por el ejemplo colectivo, que era la acción de extraer las cosas.

Sí en otra ocasión lo primero que se haga es ayudar para salvar una vida, lo secundario será el robar o cualquier tipo de acción que nos perjudique.

Esto desencadena una serie de acciones y culpabilidades al por mayor, dónde queda esa responsabilidad de la autoridad que está en el lugar; porque frente de ellos se llevan las cosas.

Dónde está la ayuda humanitaria de los pueblerinos cada que surgen estos acontecimientos. Cada que esto sucede la mercancía se ofrece en las redes sociales ósea compras robado.

A qué hora las autoridades correspondientes tomarán cartas en el asunto para tipificar este delito como robo.

Finalmente no pensarás del gran riesgo que corres cada que haces esto, porque mientras estás en el accidente corres mucho peligro.

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