Las ocurrencias de Isabel Inés Romero

Contrapunto

Miguel Ángel Gómez Ruiz

Hace apenas unas horas y de un plumazo, el Consejo de la Judicatura, presidido por Isabel Inés Romero Cruz, determinó cerrar 29 juzgados situados a lo largo y ancho del estado, por considerar que eran poco funcionales pues –según los que integran el Consejo- no había mucha exigencia de trabajo y no se justificaba el gasto.

Así funciona ahora el Poder Judicial del Estado de Veracruz, que, bajo el mando de Isabel Inés Romero Cruz, convertida en presidente ya estando jubilada, ha ido de mal a peor.

Y es que el detalle a considerar aquí es que la justicia en Veracruz es lenta de por sí. Añádale la pandemia que provocó que la mayor parte del Poder Judicial haya estado cerrado por meses, únicamente recibiendo demandas y solicitudes. Sin justicia y con decenas de miles de expedientes sin avanzar. Y ahora, el cierre de juzgados, muchos especializados en Materia Familiar.

Es decir, muchos jovencitos olvidados por sus padres, demandas de divorcio y pensiones y otros temas se quedarán en el sueño de los justos, tan sólo porque alguien en Xalapa determinó que no es importante conservar ese tipo de juzgados y por ello tienen que desaparecer. Al fin y al cabo, estamos en Veracruz y en este momento domina la Cuarta Transformación, válgame.

Desaparecen juzgados en Materia Familiar en Acayucan, Coatepec, Coatzacoalcos, Córdoba, Jalacingo, Misantla, Orizaba, Pánuco, Papantla, Poza Rica, San Andrés Tuxtla y Xalapa.

La finalidad es ahorrar 22 millones de pesos para aplicarlos en otros rubros, de acuerdo a lo que dictaminaron los integrantes del Consejo de la Judicatura, que debieran estar encabezados por Isabel Inés Romero Cruz, pero recordemos que ella no manda allí, sino el alfil de Juan Javier Gómez Cazarín y que lleva por nombre Humberto Hernández Reducindo, convertido en el que manda allí, por sobre quien sea.

Por supuesto, la medida provocó reacciones de abogados en distintas zonas del estado. Por ejemplo, en el sur, un grupo de abogados encabezados por Moisés Zarco lamentaron el cierre de los juzgados 14 y 16 en Materia Familiar.

Fausto Vicente Torres Pérez, otro litigante, dijo que el fin no justifica los medios y adelantó que el acceso a los defensores también será restringido.

“Bajo el supuesto de austeridad y presupuesto que supuestamente será usado en la creación de los nuevos Tribunales de justicia laboral están cerrando dos juzgados familiares en Coatzacoalcos”.

Sin embargo, consideró que la decisión no es acertada dado que la carga de rezago aumentará; “Si ya de por sí con el tema de la pandemia se ha limitado el acceso a los juzgados familiares ahora con esta medida desatinada provocará mayor agravio a las familias que acuden a solucionar controversias ante dichas instancias”, expresó el integrante de la agrupación.

De igual forma, abogados del sur, llaman a acciones de resistencia para el próximo lunes para exigir que no se cierren los juzgados pues ello provocará que haya una mayor carga de trabajo y a la vez, excesiva demora en la aplicación de justicia.

Citaron para el próximo lunes a las 8:30 de la mañana a abogados y justiciables de Coatzacoalcos, Minatitlán, Acayucan, Jaltipan, Cosoleacaque, Uxpanapa, Nanchital, Ixhuatlán del Sureste, Agua Culce y Las Choapas para manifestarse por esa acción que consideran perjudicial.

Esa ha sido la forma de actuar tanto de Isabel Inés Romero Cruz como de los integrantes del Consejo de la Judicatura. De un plumazo cometen una serie de barbaridades en perjuicio de abogados y justiciables. Además de que también ocasionará el despido de trabajadores de contrato, seguramente.

Aunado a ello, la incapacidad de implementar la justicia digital y las nulas acciones para disminuir los riesgos de que en oficinas y juzgados se propague el covid-19, por cierto, con mayor crecimiento en los últimos días. Así las cosas.