Circo quedó atrapado en Veracruz por la pandemia, familia lleva 13 meses sin trabajo
Jorge Briones /
VERACRUZ, VER.- Su última función fue el 13 de marzo de 2020, ningún integrante de esta familia circense se imaginó lo que vendría a partir de ese momento.
Con 35 años dedicándose al circo, estos artistas del espectáculo visual llegaron desde la Ciudad de México al puerto de Veracruz en una gira que los llevaría a recorrer todo el estado, pero ese viernes 13 de marzo la autoridad municipal les dijo que debían ponerse en cuarentena, una cuarentena que se ha convertido en 13 meses sin trabajo.
La pandemia los dejó atrapados en el municipio de Veracruz impidiéndoles concluir su gira.
“Nuestra última función fue el 13 de marzo de 2020, desde entonces no damos funciones, ya cumplimos un año y días, comercio nos avisó que el permiso no podía llevarse a cabo porque estaba por entrar la pandemia y entonces desde el 13 de marzo nos avisaron que no se permitían más eventos masivos, de hecho ya estábamos instalados, ya habíamos trabajado, logramos trabajar solamente dos días y entonces llegó, fue viernes 13 y pararon labores y desde entonces no hay funciones”, comentó Aldo Mendoza, Alambrista del Circo
Los artistas del circo Kristihanv, llevan todo ese tiempo “atrapados” en la localidad de Mata Cocuite, Veracruz rentando por dos mil pesos al mes un terreno donde están sus campers, carpas y automóviles estacionados esperando el anuncio de reanudación de actividades.
“Mi número fuerte al empezar era como artista, ya como artista fui aprendiendo cosas en el trabajo, como vas a hacer la instalación del circo, como vas a hacer tus aparatos para que tu tengas para trabajar, cuando nos dijeron sabes que que no pueden trabajar, oiga le digo, hasta cierto tiempo, bueno pues total pensamos que un mes, ahí la vamos pasando, dos, tres meses, a caray no pues ya, entonces se nos ocurrió por probar, sabes qué pues hay que ir a vender una cosa, hay que vender otra”, explica, Fernando López Ramírez, Trabajador del circo.
Para subsistir, tuvieron que vender dos de sus vehículos y emprender otras labores como la elaboración y venta de dulces además de ofrecer servicios de herrería para comprar comida y pagar la renta del lugar donde viven temporalmente.
“Por nuestra mente nunca pasó que llegáramos a estos extremos, de una pandemia tan larga que ya es un poco más de un año, si la verdad es que nunca nos imaginamos, pues hemos hecho de todo vendiendo en las calles, lo que se vende dentro del circo lo hemos hecho ahora en las calles, hemos salido con los vehículos de publicidad que tenemos, hemos salido a las calles a vender palomitas, manzanas cubiertas con chocolate, con chamoy, hemos vendido piña, hemos vendido sandía pues ahora sí que hemos buscado la forma, de sobresalir” señala Francisco Mendoza Tolentino, Representante del Circo.
Al inicio eran 35 artistas que dependían del circo, ahora sólo 8 miembros de la familia que entre ellos se animan con la esperanza de que la pandemia pronto de tregua y les permitirá retornar a Ciudad de México con su equipo.
Piden a la autoridad de Veracruz flexibilice las restricciones para permitir la reanudación de actividades circenses con aforos controlados y haciendo uso de las medidas sanitarias correspondientes, pues ellos saben que en la capital del país, espectáculos de este tipo ya son permitidos bajo esos lineamientos.